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Pues nada más nos queda esperar oír su nuevo disco y de ahí ponerles una palomita o darles un estirón de orejas. Por supuesto que el género de División Minúscula es el rock punk, pero, según su sentido de la marea de audiencia, debían arriesgarse con la inclusión de más pop en sus notas.
No es seguir el afán de criticar a la agrupación por la mala, pues como la banda tuvo el acierto de decir, ahora son mejores compositores que en su pasado disco “Defecto perfecto”. Pero verán que muchos de los fanáticos inclinados más al estilo de los bajeos ramplones del rock se contrariarán.
Eso sí, así como también habrá quienes, gustosos del pop y sus variantes, lo alabaran. Más con canciones como “Cursi”, el rock en su estado más florido, digno de admiradores con sed de propuestas nuevas y más evolucionadas.
Es cierto que División Minúscula ya no son aquel grupo con su primer disco en mano “Extrañando casa” de hace ocho años. Su prosperidad les ha permitido a estos chavos conocer el medio artístico, recorrido furiosamente en sus conciertos, suficientemente, como para saber que estancarse en el mismo estilo de música es una clavada impertinente, cuyo encierro, podría acabar con los gustos de sus fans y por ende con sus canciones.
Tal vez sea por eso que ahora sus melodiosos tracks se escuchen tanto en estaciones de radio pop como también en frecuencias de rock. Pero lo más cierto es que no tocan solo por estrategias de radiodifusión, si no de hecho, como presumió Kiko, amo benévolo de las batacas y las cajas, tratar de vivir lo que predican en sus letras.
Que en el caso de “Sirenas”, este su último disco ya a la venta, lo jactan bastante apropiadamente. Nada más pelen oreja a sus once tracks descorazonadores cantándole a lo que pasa en el mundo como una señal de alarma y su sencillo “Control”.
Más o menos lo que puede hacer casi medio año de trabajo continúo, composición y ajustes, un estudio en los Ángeles, una producción de ellos mismos y un ingeniero respetable de este nuestro condenado ámbito sinfónico.
División Minúscula puso todo su empeño en su disco. Adelante, mantengamos viva la lumbre que arde por sus instrumentos y sus voces, asistamos a sus conciertos y no dejen de oírlos.
Súbanle al volumen de las bocinas escuchando los discos de sus bandas preferidas, buena música y descontrol, debandasyrockversos.blogspot.com
